Con acuerdo entre Administración y contratistas, empieza a despejarse camino para tranvía.

Después de un año de suspensión de las obras del llamado TransMilenio ‘ligero’ sobre la carrera 7a., el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) y los contratistas -Sainc y El Cóndor- acordaron liquidar el contrato firmado entre las partes. (Lea también Alcaldía y contratistas de la carrera Séptima lograron un acuerdo).

Como lo anticipó EL TIEMPO, los constructores renunciaron a cualquier indemnización por las utilidades que dejaron de recibir, tasadas en unos 18.500 millones de pesos, actitud que Petro aplaudió. «En lugar de amasar fortunas ponen el nombre de su empresa y el interés general por encima del de ellos», puntualizó.

Con esta decisión, podría abrirse paso el deseo del alcalde Gustavo Petrode construir un tranvía en ese corredor vial. De todas formas, según la directora del IDU, María Fernanda Rojas, cualquier decisión que se tome tendrá en cuenta a los vecinos. «Vamos a consultar e incluir a los actores sociales afectados», señaló la funcionaria. 

Mauricio Rico, de Corposéptima, dijo: «Esperamos que sea cierto, porque hasta ahora nadie nos ha escuchado».

La liquidación del contrato se hará en los próximos días y podría bordear los 2.500 millones de pesos por conceptos de legalización del contrato y pólizas, entre otros gastos.

Sin embargo, Rojas no precisó el monto total. «Estamos haciendo un cruce de cuentas para definir qué no se pagó antes de la suspensión, si hay dinero por legalizaciones pendientes, etc. -dijo-. Aunque la ley da cuatro meses de plazo para liquidar el contrato, nos comprometimos con Sainc a hacerlo antes de 30 días».

La Administración decidió no construir la troncal ‘ligera’, adjudicada hace dos años por 84.000 millones de pesos. La opción de un tranvía, según expertos, podría costar cerca de 2,7 billones de pesos y se haría por medio de una Alianza Público-Privada (APP) en la que ya hay dos proponentes: una firma canadiense y Sainc.

Cuentas claras

Las firmas habían solicitado un anticipo por 15.000 millones de pesos, dinero del que solo se retiraron unos 1.800 millones de pesos que ya fueron desembolsados. «Esa plata se giró en una cuenta para amortizar los pagos según el avance de los trabajos, pero como no hubo ejecución, el dinero no se tocó», señaló Rojas.

También alcanzaron a invertir 9.500 millones de pesos en obras de adecuación de desvíos, planes de manejo de tránsito y manejo ambiental.

REDACCIÓN BOGOTÁ

Herramientas

• Imprimir
• Reportar Err