Expertos nacionales e internacionales coincidieron el miércoles en la necesidad de modificar el modelo de estratos socioeconómicos que se utiliza en Colombia para entregar subsidios y rebajar tarifas a los más pobres, pero dividieron opiniones en cuanto a qué tan radical debe ser la reforma.

El secretario de Planeación, Gerardo Ardila, que lidera la eliminación de los estratos, por considerar que generan estigma social y segregan a la población entre ricos y pobres, reunió en un seminario a expertos internacionales y a delegados de las empresas que utilizan la estratificación a la hora de focalizar sus inversiones para escuchar los pros y contras de la propuesta.

La secretaria de Hábitat, María Mercedes Maldonado, salió en defensa de la estratificación, pues estima que su eliminación pondría en peligro la política de la solidaridad entre estratos que permite los subsidios cruzados. Es decir, se cobra un sobreprecio en las tarifas de los estratos altos para rebajar las de los más pobres.

Lo que hace el modelo de la estratificación es identificar las características de las viviendas y su entorno, para clasificarlas en seis estratos. En el 1 están las de peor calidad y en el 6, las mejores. El modelo supone que las personas que quedan en los altos (5 y 6) tienen la mayor capacidad de pago y las de los más bajos (1 y 2), la menor.

Los estratos surgieron hace más de 30 años para fijar tarifas de servicios públicos, pero con el tiempo se empezaron a aplicar para liquidar el impuesto predial y focalizar los subsidios en salud, vivienda y otros temas.

Entidades como Catastro consideran que en la medida en que la calidad de las viviendas ha mejorado y los avalúos catastrales están actualizados, el ideal para liquidar el impuesto predial es el avalúo, porque hoy hay predios con avalúos altos –en muchos casos más elevados que los de estratos 4, 5 y 6– que por estar clasificados en 1 y 2 pagan tarifas bajas, cuando deberían pagar unas más altas.

Maldonado explica que la lógica para el predial y los avalúos no se puede generalizar. “Que mejore el entorno y la vivienda de las personas no implica que tienen más ingresos”, afirma.

Roberto Lippi, oficial de ONU Hábitat, dijo que lo importante es que Colombia enfoque los subsidios sobre las personas y las familias y no sobre las viviendas.

Para Eva María Uribe, de Gas Nova, en la discusión de los estratos hay tres problemas diferentes que ameritan soluciones individuales: el del ocultamiento de la riqueza en el caso del predial, el de los subsidios y la contribución en los servicios públicos y el de atención a población vulnerable.

Ella y los delegados de las empresas de servicios públicos defendieron la importancia de los subsidios cruzados. En Bogotá, en el 2012, los hogares de estratos 1 y 2 recibieron subsidios por cerca de 583.000 millones de pesos, que se financiaron en parte con los 489.000 millones de pesos que pagaron como sobretasa o aporte solidario los estratos altos.

Raúl Martínez, del Dane, aseguró que el problema no es la estratificación sino la forma como se hace y como se aplica. Recordó que ese modelo se creó para las tarifas de servicios y no para temas como el predial o los subsidios.

El Catastro no necesita estratos

El Departamento de Catastro defiende la eliminación del criterio del estrato para liquidar el impuesto predial, porque ese sistema está escondiendo inequidades.

Advierten que existen predios de avalúos iguales que pagan tarifas diferentes: más baja por estar en estratos 1 y 2 o más alta por estar en 5 y 6. Según la entidad, el estrato ha dejado de ser relevante a la hora de definir los avalúos de los predios, en los que hoy pesa más el mercado inmobiliario.

Estrato esconde a los vulnerables

La Secretaría de Salud considera que los estratos están distorsionando la selección de quienes deben recibir subsidios.

El problema está en que la base para identificar a los potenciales beneficiarios parte de hacer un barrido entre quienes figuran en estratos 1 y 2. Eso hace que personas de estratos 3, 4, 5 o 6, que requieren subsidios por falta de ingresos, no sean tenidas en cuenta. En Bogotá 1’200.000 personas tienen salud subsidiada, pero las que necesitan son 2 millones.

Así funcionan los subsidios en Italia

En Italia los subsidios se enfocan en las personas y no en la vivienda. Existe un Índice de Situación Económica que valora 400 variables en tres bloques: ingresos, patrimonio y circunstancias especiales de las personas. Se cuenta con declaración de renta universal y con bases de datos al día. Además, cada seis meses se verifican las condiciones especiales para ver si la situación de la persona ha cambiado y sigue necesitando ayuda.

Ricos deben financiar tarifas de los pobres

Las empresas de servicios públicos advirtieron que si se decide la eliminación de los estratos sociales se debe preservar la política pública de que los ricos hagan contribuciones para los pobres. Es lo que se llama la política de los subsidios cruzados en la que las personas de estratos 5 y 6 hacen aportes solidarios (precio más alto de la tarifa) para poder subsidiar a los residentes de estratos 1 y 2.

En el caso de Bogotá, los estratos altos, y los usuarios comerciales e industriales de la ciudad, aportan al año 250.000 millones de pesos en mayor costo de su tarifa de acueducto, alcantarillado y aseo, y con esos recursos se subsidian las tarifas de los hogares de bajos recursos.

Eliminar los estratos sin salvar los aportes solidarios lo que se recauda por ese concepto se convertiría en una carga fiscal para los municipios, que tendrían que asumir el costo de los subsidios. “Los estratos altos y con capacidad de pago serían los beneficiados de la eliminación de la estratificación”, advirtió Óscar Pardo, asesor de la Gerencia de Planeamiento del Acueducto de Bogotá.

De todas maneras, las empresas reconocen que hay que evaluar el caso específico de propietarios de predios en estratos 1 y 2, que utilizan el estrato para arrendar o vender más caro sus inmuebles. Ellos no necesitan de los subsidios que se otorgan por el estrato, pero los usan para valorizar sus propiedades o cobrar más caros los arriendos. Aquí, el subsidio termina en quien no lo necesita.

Por:  BOGOTÁ |

10:00 p.m. | 13 de agosto de 2014